‘La virgen de los sicarios’ y ‘Ciudad de Dios’

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‘La virgen de los sicarios’ es basado en un libro por Fernando Vallejo y es montado en Medellín, Colombia, el año después de la muerte de Pablo Escobar. Trata de la relación homosexual entre una versión ficcional de Vallejo y un sicario de 16 años, Alexis. ‘Ciudad de Dios’ también es basada en una novela y representa la aumentación de crimen organizado en la favela titular en un barrio periférico de Rio de Janeiro entre el fin de los años 60 y el principio de los años 80. Ambas películas tratan de la guerra de carteles de droga, la violencia y el asesinato se asociaron con narcotráfico en pueblos desfavorecidos. Mientras la guerra entre dos carteles opuestos es el principal argumento de ‘Ciudad de Dios’, es secundario a la relación entre Fernando y Alexis en ‘La virgen de los sicarios’.

Título: Ciudad De Dios.

Cronológicamente las películas son muy diferentes porque ‘La virgen de los sicarios’ sigue una construcción lineal que mueve continuamente adelante. La conclusión sugiere la naturaleza circular de la vida en Medellín porque después de la muerte de Alexis, Fernando entra en otra relación con Wilmar (el asesino de Alexis, lo que Fernando no sabe) que tiene una semejanza llamativa a Alexis. Wilmar también muere que sugiere que la vida en el pueblo es destinada a la repetición: la juventud es predestinada morir joven porque buscan constantemente venganza para muertes anteriores y no hay nada que la generación más vieja puede hacer. En ‘Ciudad de Dios’ la película empieza casi al fin y relata la historia por escenas retrospectivas que cubren acontecimientos anteriores y explican la situación actual. Hay también escenas retrospectivas para los personajes individuales que dan informaciones antecedentes y contextualizan el personaje dentro de la situación. La película entonces vuelve a la escena del principio que ahora tiene sentido al espectador, y el resultado de la escena es revelado. Buscapé se vuelve un fotógrafo exitoso que muestra que no es condenado seguir los pasos de su familia debido a circunstancias y que se puede cambiar su destino por las decisiones que se toma.

Un elemento grande de ambas películas es el escenario. Hay una grande diferencia entre la riqueza y la clase social de regiones con los pueblos desfavorecidos que son los más violentos hasta el punto que aún la policía no irá allí. La región de Medellín en que Fernando habita, el centro rico, es completamente diferente a las comunas en las montañas donde viven Alexis y Wilmar. El centro es moderno, urbano, con muchas infraestructuras incluyendo bloques de apartamentos y conexiones de transporte. Por contraste, las comunas son sin forma con ‘casas’ que están hechas de materiales de basura y chatarras. Debido a una falta de espacio y de casas asequibles en el centro, el pueblo de las montañas expandió con necesidad. Como resultado, hay una falta completa de planificación y los edificios son construidos aleatoriamente. La mayor parte de Ciudad de Dios es montada en la favela que cambia durante las décadas que la película representa. Al principio es sin forma y subdesarrollado pero  por los años 80 ha adquirido las calles pavimentadas, bloques de edificios y un elemento de desarrollo. La privación del pueblo es recalcada cuando Buscapé va al periódico y queda en la casa de la periodista. Vive en un área agradable del pueblo y esto es evidente por la limpieza, el desarrollo alto y la abundancia de servicios. Las diferencias entre la clase y la riqueza de personajes afectan sus oportunidades: el pobre e inculto es condenado a una vida de droga y violencia mientras el rico puede dejar el pueblo.

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En ‘Ciudad de Dios’, se ve los personajes de lejos y con mucha separación. Se quedan de dos dimensiones y no son dados mucho análisis psicológico. Esto parece implicar que no hay objetivo relacionar con un personaje porque probablemente se morirá pronto. El director no procura influir el espectadora elegir una afiliación. Todos han cometido un crimen en la favela, nadie es inocente e aún los personajes buenos giran malos. Aún los niños no son inocentes y corren con fusiles. No muestran ningún respeto para sus ancianos porque al fin es la banda de niños que asesina colectivamente a Zé y no muestran remordimiento. La violencia es tan constante y dominante que se vuelve repetitiva y pierde su poder de ‘shock’. El público viene a aceptarla y no hay implicación de culpa ni crítica porque la violencia es restringida a la favela. ‘La Virgen de los sicarios’ es de la perspectiva de Fernando y como resultado no puede quedarse impasible e indiferente. Sin embargo su personaje no implica que la violencia que presencia esté de hecho injusta. Parece ligeramente fascinado por la violencia y la acepta como una ocurrencia normal. Esto quizás sea porque la película es menos violenta que la novela y hay más explicaciones de las razones detrás de las acciones de los personajes incluyendo más información antecedente de Alexis y por qué se volvió tan violento. El asesinato sin motivo de una mujer embarazada no ocurre en la película y los tiroteos son menos gráficos. La película absorbe su audiencia a adquirir ciertas orientaciones políticas dentro el contexto de una sociedad sin morales. No podemos impedirnos criticar una sociedad en que las personas inocentes son alcanzadas en la guerra de cártel y matadas sólo para estar en el lugar equivocado importunamente.

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Otras diferencias notables entre las películas incluyen religión y amor. En ‘La virgen de los sicarios’ la religión es un aspecto importante de la vida de los personajes (como demostrado por el título) y Fernando y Alexis gasta mucho tiempo visitando parroquias diferentes. La virgen del título se refiere a la santa patrona de Medellín que es la Madre de Ayuda Perpetua. La yuxtaposición de las creencias religiosas de los personajes y la indiferencia para la vida humana es irónica. ‘Ciudad de Dios’ es un título irónico porque menciona a Dios pero la favela es tan violenta y desfavorecida que Dios lo dejó hace mucho tiempo. Los habitantes son maldecidos más que bendijo.

Ciudad de Dios trata del amor heterosexual más que el amor homosexual de ‘La virgen de los sicarios’. Un elemento común en ambas es la diferencia de edad entre dos caracteres que entran en relaciones sexuales: Buscapé con la periodista mayor, y Fernando que tiene aproximadamente 50 años con un adolescente de 16 años. Las relaciones son no iguales en que la persona mayor ofrece a la persona más joven la experiencia, las oportunidades y cosas materiales mientras que la persona más joven es relativamente ingenua e inexperimentada. La homosexualidad en ‘La virgen de los sicarios’ presenta un problema en la sociedad sumamente conservadora y religiosa de Medellín. La pareja recibe mucho abuso homofóbico y Alexis mata a un hombre que grita palabras despectivas.

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Comentario de la poesía – Alejandra Pizarnik

LA DANZA INMOVIL

Mensajeros en la noche anunciaron lo que no

oímos.

Se buscó debajo del aullido de la luz.
Se quiso detener el avance de las manos

enguantadas
que estrangulaban a la inocencia.

 Y si se escondieron en la casa de mi sangre,
¿cómo no me arrastro hasta el amado
que muere detrás de mi ternura?
¿Por qué no huyo
y me persigo con cuchillos
y me deliro?

De muerte se ha tejido cada instante.
Yo devoro la furia como un ángel idiota
invadido de malezas
que le impiden recordar el color del cielo.

Pero ellos y yo sabemos
que el cielo tiene el color de la infancia muerta.

(De Las aventuras perdidas, 1958)

 

El poema es de Alejandra Pizarnik, una de las grandes poetas del siglo XX y una de las voces más representativas de la generación de ’60. Nació en Buenos Aires en 1936 a una familia de inmigrantes rusos-judíos. Durante el periodo de la publicación de su primer libro, cursaba clases de filosofía, periodismo y literatura en la Universidad de Buenos Aires. También se interesó en el psicoanálisis y comenzó a tomar clases de pintura con el pintor surrealista Juan Batlle Planas. En 1960 se trasladó a París, donde pasó cuatro años de su vida y forjó amistades con Julio Cortázar y Octavio Paz. Debido a su carácter depresivo, pasó un tiempo internada en un hospital psiquiátrico y en 1972, a la edad de 36, se suicidó con una sobredosis.

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La poesía de Pizarnik es surrealista, sin embargo, no se encasilla fácilmente en ningún movimiento dentro de su generación y la poeta no tuvo interés en la poesía comprometida que se escribía en Argentina durante estas décadas de tensiones políticas. El rasgo que más destaca de su poesía es el uso de imágenes ilógicas y oníricas. También emplea las tradiciones románticas, simbolistas y surrealistas. El simbolismo que utiliza muestra la influencia de los simbolistas franceses, como Rimbaud, Verlaine, Mallarmé y Lautréamont, que leyó en su adolescencia. Su estilo se caracteriza por la economía verbal y la búsqueda del lenguaje exacto aunque al final de su vida, se siente frustrada con el lenguaje. Su poesía se encargó de poner en escena lo desgarrador del silencio creativo, abriendo una puerta para las nuevas mujeres poetas, para trabajar sobre ese material.

Temas que aparecen frecuentemente en su obra:

  • La muerte
  • El silencio
  • La infancia y la orfandad
  • La enajenación
  • El ensimismamiento
  • El desdoblamiento del yo
  • La angustia existencial

El Poema

El título es una paradoja porque la definición precisa de danza es el movimiento. Es casi como la danza ha sido detenido medio-movimiento y la imagen de la danza es inmovilizada en la intemporalidad. La inmovilidad podría referirse a la apatía y el vacío que paralizan y se asoció con depresión. La línea “invadido de malezas que le impiden recordar el color del cielo” también podría ser una alusión a la depresión y la ‘niebla’ que crea. Las “malezas” son una representación de la depresión que tira la víctima en tal estado del vacío y de la desesperanza que ya no puede relacionarse con el mundo verdadero o tomar parte en la realidad. “Me persigo con cuchillos” podría ser una referencia a la autolesión pero lo que es seguro es que el dolor que se siente es autoinfligido y la atrapando en un abismo.

El poema falta una forma estandarizada o una rima y parece correr como una verborrea. La estructura irregular de las frases refleja el patrón irregular y errático del pensamiento de la narradora. No está claro a quien se dirige la narradora durante la segunda estrofa con muchas preguntas. Hay un elemento de desesperación porque nadie responde y sus preguntas nunca son contestadas. Quizás habla con ella misma en una manera casi psicopática (“y me deliro”) porque es insegura de quien es ya. Las referencias ambiguas al “ellos” apoyan esta teoría. Pero, ¿Quién son “ellos”? Se siente una afinidad con ellos como muestra la línea “pero ellos y yo sabemos”. El ‘otro’ no identificado no es realmente una entidad física pero una invención de su imaginación. El cambio en el tiempo y de hablar de “ellos” en la tercera persona a hablar repentinamente en la primera persona singular es brusco y hace más ambigua la relación entre el ‘otro’ y la narradora. Quizás “ellos” son la parte distorsionada de su personalidad: “mi casa de sangre” podría referirse a su cuerpo y por lo tanto “escondieron” dentro de ella misma hasta que ahora por último escaparan cuando no puede controlarse.

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No hay descripción innecesaria y cada frase es muy sucinta con palabras cuidadosamente elegidas. Da el poema un tono práctico o flemático que bruscamente contraste con el tema. Sin embargo, las palabras elegidas son más poderosas en su forma de hablar porque el lector comprende que no son florituras innecesarias. Hay muchas imágenes violentas asociadas con las palabras siguientes: “la furia”, “cuchillos”, “aullido de la luz”, “muere”, “la casa de mi sangre”. Son referencias a la muerte, a la sangre y a la violencia que contrastan bruscamente con las menciones de niñez. La violencia siempre es asociada con la referencia a la niñez como: “se quiso detener el avance de las manos enguantadas que estrangulaban a la inocencia”. La niñez se hizo ilícita por una obsesión morbosa con la muerte. La niñez de que habla la narradora no es el tiempo feliz y sin preocupaciones de inocencia que el lector se asocia consigo. Quizás es una referencia a la interrupción de niñez porque los niños crecen demasiado rápidamente en un mundo ‘malo’ y extremadamente dotado de sexo. La niñez no puede ser inocente porque es corrompido desde el principio y cada niño crecerá ser un adulto así su inocencia es manchada por su futuro predestinado y corrupto. Todo que se considera como normalmente puro e inocente es corrompido por la narradora y hecho malicioso o violento. El símil “como un ángel idiota” corrompe la imagen tradicional de un ángel como alguien que es puro e ingenuo y compara estas calidades en su lugar a la tontería y a la irracionalidad.

La línea final del poema es aún más ambigua y obliga al lector interrogar lo que ha leído y también a considerar lo que es el color verdadero de “la infancia muerta”. La infancia muerta no es generalmente una comparación hecha con color porque es un concepto abstracto así que el lector se debe decidir lo que es el color del cielo. Tomando en consideración el resto del poema, es probable una imagen violenta. A pesar de ser incluido en el resto del poema con “lo que no oímos” y las preguntas retoricas, el lector es excluido al fin porque ambos la narradora y el ‘otro’ no identificado saben “que el cielo tiene el color de la infancia muerta” y lo que es eso color. Quizá es una cosa favorable que el lector no puede comprender el color verdadero del cielo porque implicaría un problema grave que sólo sufre la narrador. Somos dejados reflexionando la estabilidad y la salud mentales de la narradora pero al menos el lector puede estar seguro que no esta tan loco.

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‘El mar del tiempo perdido’ de Gabriel García Márquez

RESUMEN: El cuento fue escrito en 1961 y relata la historia de un pueblo costero en América Latina y la llegada de un gringo quien se presenta como “el hombre más rico de la tierra”. El señor Herbert aparece dentro de un aura de esperanza porque un olor de rosas ha penetrado el pueblo desolado. La mujer de Jacob, Petra, dice que el olor es un indicio de Dios que ella va morir. El señor Herbert tenía tanto dinero que no sabía dónde meterlo y toma la decisión de “recorrer el mundo resolviendo los problemas del género humano”. Su objetivo es de “repartir el dinero” pero para obtener el dinero los ciudadanos tienen que entretener al gringo y se humillan. En vez de ilustrar “el más equitativo sistema de distribución de la riqueza”, el señor Herbert introduce el juego, la deuda y la prostitución al pueblo. Jacob pierde su única posesión, su casa, para satisfacer la deuda que ha acumulado en juego con Herbert.

Luego, Herbert exige una semana de fiesta incluyendo música, fuegos artificiales y acróbatas. Describe una ciudad del futuro con rascacielos pero los ciudadanos no pueden identificarse con esa imagen. Solo Herbert tiene una razón para celebrar porque ahora es el dueño de la propiedad de todos y se siente omnipotente. Cuando Jacob dice que Herbert va morir debido a tanta fiesta responde que “tengo tanto dinero que no hay ninguna razón para que me muera”.

Cuando acaba la semana, Herbert hace una siesta interminable. Duerme tanto tiempo que todas esperanzas para el desarrollo del pueblo son desvanecidas y el sacerdote cree que el pueblo es para la gente maldita y se lo va. Cuando Herbert se despierte por fin, tiene hambre pero debe que cazar cangrejos con todos los ciudadanos para sobrevivir porque no hay nada otro para comer.

La última parte del cuento es menos clara. Herbert y Tobías van a cazar tortugas pero en la profundidad del mar buscan ciudades perdidas hace mucho tiempo, y personas muertas flotantes. Herbert dice a Tobías que no puede contar la verdad porque provocaría desorden en el pueblo.

Cuando regresan, Herbert decide que se deben afrontar a la realidad: el olor de rosas nunca volverá. Petra dice que nunca ocurrió. Herbert decide partir, diciendo “De modo que me voy. También ustedes debían irse. Hay muchas cosas que hacer en el mundo para que se queden pasando hambre en este pueblo”.

NARRACION: Este cuento está muy fuertemente marcado por la búsqueda de nuevos rumbos narrativos y recoge los esfuerzos del autor por integrar la dimensión imaginaria a la realidad política y social. La narración oscila constantemente entre dos planos diferentes, pero integrados: el mundo onírico de la imaginación y la fantasía, y la realidad histórica y social. La integración del discurso directo dentro del texto hace ambigú quien dice las palabras y que punto de vista tiene el narrador.

ESTILO: Elementos de realismo mágico porque no hay una jerarquía entre lo natural y lo sobrenatural. Tobías acepta la explanación sospechosa de Herbert sobre la ciudad submarina. El autor amarra la realidad y la fantasía en un modo tanto directo que parece tener sentido y ser creíble. Otros elementos de humor y pathos.

TEMAS:

El tiempo: el mar = el pasado; la ilusión del pueblo que describe Herbert = el futuro; el olor de rosas = el presente. Hay una regresión, una repetición de acontecimientos porque nunca avanza. El tiempo es circular, el cual representa el conflicto en América Latina y el Caribe durante la época con guerra civil y cambio de poder casi constante.

El mar: es poderoso y complejo, tan misterioso que nuestra mente racional no puede entenderlo por completo. Los ciudadanos son vulnerables al mar y lo que llega de ello – eso es también una vulnerabilidad al extranjero.

SIMBOLOS:

Señor Herbert: imperialismo, dinero y prosperidad personal.

Tobías: juventud, tiene en sus manos el conocimiento y el poder de reformar su situación.

Jacob: generación mayor, aferrada al amor que siente por el lugar donde nació, se creó, conoció el amor, la vida y la muerte.

Pueblo: su aridez muestra la rudeza con la que se vive en América Latina, la rudeza con la que sus habitantes lidian y se forman como luchadores del mundo.

Mar: por ser un elemento que clásicamente ha servido para renovar las poblaciones (el Arca de Noé, el mar lavó la tierra para acabar con las generaciones que pecaban) este mar trae el recuerdo de lo mal y podrido que está el pueblo, pero el mismo contiene salvación y renovación.

Petra: desilusión por vivir en un pueblo sin progreso ni prosperidad, simboliza una realidad cruda, pues un pueblo con mujeres sin ilusión de vivir no produce generaciones prosperas para sacar al pueblo de la pobreza, tanto que ni hijos tuvo. El estado de mujeres en América Latina: discriminación y desigualdad.

ANALISIS: Fredric Jameson dice que toda la literatura del tercer mundo es alegórica y toda la literatura del primer mundo es psicológica. Es una oposición entre la teoría de Marx y Freud pero, ¿se puede decir que esto cuento es alegórico?

El cuento es una síntesis experta de las relaciones políticas y económicas entre los Estados Unidos y América Latina. La visión que el señor Herbert tenía de su misión en el mundo es análoga a la imagen de los Estados Unidos que los círculos gobernantes de esa nación intentaban proyectar en ese momento en América Latina. En esa época llega a la presidencia de su país John F. Kennedy y se crea la Alianza para el Progreso y los Cuerpos de Paz, los cuales, al igual que la política económica norteamericana hacia los países subdesarrollados, se presentan como un intento de ayudar a esas naciones a resolver sus problemas. El personaje de García Márquez que viene a ‘resolver’ los problemas de la humanidad personifica esa política. El señor Herbert no regala el dinero. Su propósito, como el de los Cuerpos de Paz, es ayudar a la gente a resolver sus problemas, movilizándolos para que cada cual actué según sus posibilidades, de tal forma que cada uno gane lo que le hace falta haciendo lo que puede y lo que está capacitado para realizar.

Sin embargo, la relación es abusiva y parasitaria porque los Estados Unidos son los invasores de América Latina y lo explotan para sus recursos naturales para su ganancia personal.  También introducen, o mejor dicho, imponen, el capitalismo con el énfasis en el material y el valor monetario de objetos. El imperialismo económico ha dejado el pueblo estar peor que fue antes que Herbert viniera; así, las falsas esperanzas por inversión extranjera están expuestas para lo que son: ninguna esperanza para el progreso de la población del pueblo aunque Herbert piense que hay razón de celebrar. Herbert siempre lleva el control de la situación, implicando la intervención del Norte en el Sur.

Por último, su sueño largo simboliza una queja común de América Latina, especialmente después de la Segunda Guerra Mundial: una tendencia, por parte de los Estados Unidos, para ignorar o descuidar a sus vecinos al Sur. El ‘Good Neighbour Policy’ terminó en 1945 y gran conjunto de desilusión se establece de los Estados Unidos que empezó inversión copiosa en América Latina pero ignoró la política. Por los 1950, relaciones de entierra-norteamericano alcanzaron a nadir.

‘Apocalipsis de Solentiname’ de Julio Cortázar

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‘Apocalipsis de Solentiname’ es una refundición, con nuevos significados, de una obra anterior de Julio Cortázar que se llama ‘Las babas del diablo’ y las similitudes entre los dos son deliberadas. Este cuento cuasi-autobiográfico relata la historia de un escritor, Cortázar él mismo, que ha viajado por Latinoamérica. Al principio está en Costa Rica en plena asombro de ‘Blow Up’ pero no quiere responder a las preguntas de la prensa y termina su recorrido en Solentiname, una pequeña comunidad insular de cristianos radicales. Allí se encuentra con unas pinturas inocentes en un rincón, las cuales le impresionan por su belleza y se da cuenta que son pinturas de campesinos de la zona, los cuales describen la esencia del lugar: “Una vez más la visión primera del mundo, la mirada limpia del que describe su entorno como un canto de alabanza”. Al día siguiente, decide tomar fotos a los cuadros, y le quedaban tantas fotos como cuadros, por lo cual alcanzó a retratarlos todos.

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Luego de su viaje, vuelve a París (donde vive) por mostrarlas a su mujer Claudine. Monta el proyector pero cuando revela las fotos, descubre que las imágenes de los cuadros han sido sustituidas por escenas de tortura, de represión política, de la
masacre de Solentiname hace poco tiempo y de guerra de todos los países de Latinoamérica, incluso la ejecución de Roque Dalton: “la pistola del oficial marcando todavía la trayectoria de la bala…cuerpos tendidos boca arriba…la muchacha desnuda boca arriba y el pelo colgándole hasta el suelo…ráfagas de caras ensangrentadas y pedazos de cuerpos y carreras de mujeres y de niños por una ladera boliviana o guatemalteca”. Está aterrorizado porque ha fotografiado lo que pensó era Solentiname pero las fotos muestran la realidad violenta. Está en estado de shock y cuando llega su mujer no puede explicar lo que pasó. Cuando la muestra las fotos ella solamente ve las fotos de los hermosos cuadros y él dice nada.

En un típico giro cortazariano, nunca explica si las otras fotos son una alucinación, un truco, un fenómeno o un milagro. Deja el lector con su propia opinión, creyendo quiere lo que quiere. Pero hay un mensaje que, detrás del exterior agradable, hay una verdad menos agradable que se ignora porque se escoge centrarse en el exterior embellecido. Una explicación del fenómeno disminuiría el mensaje y la metáfora.

La cuenta contiene alusiones abiertas al tema de la autenticidad – “¿por qué no vivís en tu patria?” – y no es difícil leerla como un gesto de autocrítica y de rectificación. El narrador se comporta como el turista progresivo estereotípico, lleno de entusiasmo para causas populares en Latinoamérica pero últimamente motivado por la voluntad del cosmopolita rico para reunir tales causas en forma de artefactos culturales. Pero estos artefactos, especialmente cuando hecho por campesinos, llega a ser efectivamente las muestras fetichizadas de un compromiso político hipotético y abstracto. De hecho, el narrador no se digna a comprar cualquiera de las pinturas, prefiriendo el método más barato y más eficiente de hacer copias fotográficas. El carácter de Ernesto Cardenal irónicamente lo acusa de ser “ladrón de cuadros, contrabandista de imágenes”.

Otro tema es la idea política del ‘escritor comprometido’ porque este cuento evidencia la época de las dictaduras en Latinoamérica, lo hace de una manera muy sutil. La frase, “parece que el escritor tiene que estar comprometido”, hace alusión al compromiso de los escritores, lo cual deja claro que el escritor quiere dejar algo al descubierto. La dificultad de conciliar un arte comprometido con el pueblo con una escritura difícil, vanguardista, aparece el en primer párrafo. La América Latina de las pinturas contrasta con la sensación del narrador en la misa del domingo, en la que, siguiendo los postulados de la Teología de la Liberación, el Evangelio es leído como si fuera parte de la vida cotidiana de los campesinos: “esa vida en permanente incertidumbre de la islas y de la tierra firme y de toda Nicaragua y no solamente de toda Nicaragua sino de casi toda América Latina, vida de la Argentina y de Bolivia, vida de Chile y de Santo Domingo, vida de Paraguay, de Brasil y de Colombia”. El arte naif de los campesinos no da cuenta del miedo, del horror de vivir en la América Latina de los setenta. Lo que el escritor comprometido debe hacer es, sin renunciar a su proyecto artístico, sin simplificar sus hermetismos, enfrentarse a esa realidad atroz y representarla. En el ejercicio literal del fotógrafo-escritor, en ‘Apocalipsis de Solentiname’, revela el apocalipsis que está detrás de los paisajes bucólicos y la mirada prístina de los habitantes del continente.